Carlos Alfonso Lancioni es el candidato que presentará la Agrupación Tradicional River Plate para las elecciones de diciembre de 2009 que culminarán con los 8 años de mandato de José María Aguilar. Lancioni es abogado especializado en Derecho Comercial y en crisis en particular por lo que se siente capacitado para sacar al club de este momento, trabajando en equipo junto a todos los riverplatenses.
¿Qué le puede aportar a River desde su profesión?
Fuente: Agrupación Tradicional River Plate
Lo fundamental es mi toda experiencia en el manejo de las crisis. Soy un especialista en crisis. Hace 35 años que ejerzo mi profesión y siempre manejé las crisis de las empresas, de las identidades y siempre me fue bien. Estoy convencido, tengo muchísimos recursos y si viniese un tema de ese River aquí, profesionalmente a esta mesa y no lo digo como fanático, el problema que tiene es muy fácil de solucionar porque la experiencia que tengo la quiero volcar en el club. Segundo, a mí me formaron para trabajar en equipo ya que no estoy acostubrado a trabajar de forma individual. La clave es trabajar en equipo y así, todos nos potenciamos mejor ya que si todos queremos jugar de 10 nos vamos a la miércoles por lo que cada uno tiene que cumplir con un rol. A mí me toca el rol en la Agrupación Tradicional de ser el mascarón de prueba porque soy el más capacitado, con total sinceridad, para hablar de esta circunstancia durante un solo período de gobierno. El tipo que quiere perpetuarse se está jodiendo la vida.
Cuando habla de solucionar el problema, ¿cómo lo haría?
Apelando a la pasión. River tiene un montón de recursos que no son explotados. El principal recurso que tiene River es su capacidad de convocatoria. Cuando viajo al interior me asombra lo que es River: hay 5, 6 pibes con la camiseta de River y el resto, disperso. Lo mejor del club está de Figueroa Alcorta para afuera ya que hay un River apasionado, con mucha mística. A ese River hay que dirigirnos que es como creció. Si ves la historia del club, River nació de pibes de clase media y fue creciendo sin ser hombres poderosos. Es una institución de socios comunes que no vivimos de este ya que trabajamos y tenemos una vocación, no como algunos directivos que se la pasan ahí, ¿decime de qué trabajan? River no es una salida laboral, no es una salida empresarial de aquellos fallidos y quebrados. Al club lo vamos a sacar adelante con la responsabilidad de todos los riverplatenses, nadie va a tener que poner un peso pero lo que hay que evitar es que se saque plata.
Una de sus propuestas es la de crear un fondo para afrontar los gastos, ¿de dónde saldría esa plata?
Eso lo proponemos como un plan de emergencia para la crisis, dependía de que pusiéramos algunos de los directivos que tomase en cuenta lo que va a pasar. La etapa electoral en River comienza el 30 de junio o sea que, todo lo que hicieron hasta ahora no tiene sentido y además, es antiestatutario. Nosotros no vamos a poner ningún afiche hasta después de las elecciones legislativas ya que no se puedan priorizar las elecciones del club por sobre las nacionales. Si esta plata que gastan los oficialistas no es guita dulce, están demostrando que son unos pésimos administradores. Con respecto a lo que vamos a encarar con los fondos, tenemos algunos contratos pensados y preparados pero no los voy a decir porque todo lo que se va decir se lo chupan. Hay muchísimos recursos para sostener a River durante el período de transición y vamos a analizar cada uno de los contratos, cada uno de los pasivos que hay en el club.
Otra de sus propuestas es que quiere que la comisión directiva esté integrada por todos los sectores que participan en River. Si eso fuese así, ¿la situación sería diferente?
No dije eso. Me refiero a que la comisión del club tiene que ser un equipo, no un rejuntado. Si invitamos a que todos los sectores que participen de River, incluida la Agrupación, a participar de un programa de transición, un programa de emergencia que creemos necesarios para este año tan crucial para la institución. Si que participen los sectores para poder deliberar pero la comisión tiene que ser homogénea, menos con sectores de la política de River que demostraron tener muy poco grado de lealtad hacia el club y hacia sus compañeros.
En el video de Por amor a River dice que “esos 18 años sin títulos se vivieron de otra manera porque se jugaba al fútbol”. ¿Qué otra diferencia encuentra entre ese River y el de estos últimos años?
Íbamos a la cancha y veíamos un equipo que jugaba al fútbol como el que hoy practica Huracán, ese es el fútbol de River. No somos bosteros, nos gusta el fútbol lindo. Si me preguntás cuál es mi sueño, obviamente el Barcelona hoy por hoy pero soy conciente que estamos en el ámbito local. Pero de los tres equipos que están peleando, hay dos que practican muy buen fútbol: Lanús y Huracán. El tercero que es Vélez no es tan malo pero supera al fútbol que hoy tiene River. Tanto Lanús como Vélez son dos instituciones muy serias que tienen la ventaja de tener hinchadas menos ansiosas que la actual hinchada riverplatense. Sus proyectos son muy serios y están dando sus resultados. Creo que la hinchada de River se bosterizó por un fenómeno de la televisación y de los negocios televisivos. El club tiene que armar un buen equipo con tiempo y ahí creo que vamos a ganar todo pero sin ansiedad. Esto me parece que es lo que está fomentando la televisión y su negocio mediático.
En lo institucional, ¿cómo era la situación en esa época?
Los directivos eran gente de bien, correcta no eran improvisados. Con ellos podías cerrar cualquier tipo de operación, no como hoy.
De hecho en esos 18 años se bancó un proyecto iniciado por Didí que promovió a Primera División a jugadores como Alonso, J.J. López, Merlo incorporando jugadores de experiencia como Perfumo que años más tarde rompería el maleficio.
En el ´75 llega Delfino que encara un proyecto muy fuerte donde se atraen a socios y se llegó a tener 120.000 socios, no se los echaba sino que se los convocaba (esto con respecto a lo social). Una muy buena idea de Jorge en el plano futbolístico fue traer a Angelito Labruna que era un hombre de calle y conocía el club. Se contrataron jugadores de experiencia como el gringo Ártico, Raimondo, Perfumo. Es decir, se mantuvo el equipo que venía jugando pero se tocaron algunas piezas fundamentales.
¿Cuál le parece que es la razón por la cual el presidente José María Aguilar y su comisión directiva no salieron en ningún momento a dar la cara por los malos resultados y la crisis institucional?
Es un caso raro de caradurez con vergüenza. De los 25 miembros de la CD hay un solo miembro que tiene la capacidad intelectual y dialéctica superior a la media que es Aguilar. Apelando a esa gran capacidad oratoria fue el que más salió a tratar de vendernos humo como decir que “River es Aruba”. El resto no tiene un grado de capacidad y capacitación. Además, cuando salieron se mostraron como opositores.
La lucha electoral de River Plate es un claro planteo de lucha ideológica. Algunos creemos en River como institución y otros que se aferran al club como un negocio. Son dos modelos totalmente diferentes. Por eso ellos apelan mucho a los medios de televisación que si puede manejar todo, lo va a manejar.
Y el modelo del cual usted habla, ¿viene de estos ocho años o de antes?
En realidad, se inauguró mucho antes. Con Santilli digamos que había algunos esbozos pero el negocio de la televisación no era como el de hoy por eso, quizás no lo pudo observar del todo. Cuando Davicce gana las elecciones en el ´89, aparece un personaje siniestro en la vida riverplatense que es Passarella. A partir de ahí, se forma una sociedad comercial formal entre ellos dos. Todo esto habla de que no se respetan los intereses del club sino que se priorizan los intereses personales que habla también, de un alto grado de impunidad. Es decir, Passarella fue un excelente jugador, el mejor número 6 pero lamentablemente, como técnico priorizó intereses personales y comerciales y si lo hizo como técnico, siendo presidente va a tener esa relación.
De las últimas elecciones tengo unos datos, haber si usted los puede corroborar. Votaron 7.579 personas cuando había más de 21.000 habilitados. Aguilar ganó con 3.938 votos.
Sí, exactamente.
¿Cree que el socio en ese momento no tenía interés en las elecciones?
Participé de esa elección y había intentado, para no quedar siempre como luchando contra los molinos de viento, unir todo lo que no era de Aguilar. Ya lo había dicho en el 2001 que si ganaba Aguilar e Israel se iba a incrementar la devastación. Intentamos unir a todos simplemente para que hubiese un equilibrio, un autocontrol. A mí me hubiese gustado que Davicce y Santilli estuvieran juntos (uno como presidente y el otro como vice) ya que es una forma de autocontrolarse. El criterio que tenían ellos de que el vice tenía que ser el más pelotudo le hizo mal a River. Yo quiero vicepresidentes con pelotas ya que creo que es la mejor forma de controlar el ejercicio del poder.
Cuando la gente ve tanta mezquindad, egoísmo no le dan ganas de participar pero nosotros estábamos en lista y las palabras hay que cumplirlas.
También se dice que hay empleados que son miembros de la barra. En muchos casos, votan a favor de Aguilar.
En este caso no va a ser Aguilar. Concretamente, el aparato electoral de River Plate existe. El que tiene el poder de ese aparato no es Aguilar sino Mario Israel porque es el presidente del Consejo de Fútbol donde está el negocio del mismo. Es el Secretario del club y por él pasan todas las licencias, padrones, trámites del personal, etcétera. También es el presidente de Marketing por donde pasa todo lo que es publicidad. Es el Monje negro ya que hace 25 años que está en el club: llegó de la mano de Santilli, después se fue con Davicce, con Pintado y después fue asesor de Aguilar.
Con absoluta sinceridad, ¿ve en el oficialismo un proyecto serio?
Quizás haya un buen trabajo de la gente del fútbol amateur, a pesar de que algunos digan que no. También, hay un chico que está trabajando muy bien que es Fernando Guarini (vocal suplente) y hasta el propio Diego Quintás (vocal titular), no tuvo un mal trabajo. Con lo cual diría que es un muchacho que si ganamos las elecciones habría que llamarlo para un cargo de asesor para así tener una vinculación técnica, con fines de que participe y se integre. No me disgusta el actual prosecretario, un muchacho técnico pero no para integrar en la lista sino para participar en los órganos técnicos. Por supuesto que no llamaría a Cavallero, Caselli, ni a Fito Cuiña.
Para terminar, ¿cómo ve a River a partir de diciembre?
River está atravesando la peor crisis de su historia aunque tuvo muchas crisis como cuando nos desalojaron que fuimos a parar a Alvear y Tagle y ahí crecimos como institución. También cuando tuvimos la crisis futbolística de los 18 años sin títulos logramos sacarla adelante y después nos cansamos de ganar títulos. Estoy convencido realmente de que vamos a tener una transición dura, racional y vamos a tener que desbosterizarnos y desracinguizarnos para volver hacer el River que conocíamos y estoy convencido de que salimos adelante. Debe haber un plan de despenalización, me parece que es una de las mejores cosas que tenemos que hacer, la transparencia de todos los actos públicos lo vamos hacer y hacernos queribles frente a tu generación. Es mi obligación para decirles este es el estatuto, estos son los balances, estas son las actas que lo tienen que tener los socios. Yo que soy dirigente opositor, mi mujer que es de la Asamblea de Representantes no tenemos acceso a la asamblea de la comisión directiva, ¿por qué tiene que ser escondido todo? ¿No es más lógico que sea trasparente? Porque cuando vos escondés las cosas es porque algo está mal. La base de River va a ser la trasparencia, me van a decir de todo pero va a ser un River trasparente y estamos trabajando en cómo lograr un nivel de interacción seria para un mundo, una sociedad distinta en el cual los socios, los hinchas podamos participar de ciertas cosas en la que todos puedan acceder a lo mismo, que tengan los mismos cargos, a los mismos derechos. Es el mundo y la sociedad que yo quiero y en la que me formé como riverplatense en el ´54, así me formé en la vida. Soy como soy y no puedo fabricarme un personaje y que cada uno, sea como sea, no se tenga que modificar.
Matías Caruso
